Los lugares imprescindibles que ver en Cabo de Gata
Cabo de Gata es un espejismo en el desierto, una obra de arte que ve cómo el sol ilumina su silueta con unos colores cálidos y bermejos las horas previas a caer la noche. Hace unas pocas semanas nos fuimos de viaje a esta perla escondida de Almería, así que si no tienes miedo a enamorarte, sigue leyendo para descubrir los lugares imprescindibles de Cabo de Gata.
Cabo de Gata en cifras y datos
Os debemos decir que el Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar se creó en 1987 y que con él se busca cuidar todo su entorno marítimo y terrestre. Con esta iniciativa se impulsa la conservación de los ecosistemas naturales y los valores paisajísticos, de modo que todas las partes implicadas puedan convivir (ciencia, turismo, educación…). Veamos más curiosidades:
- Dispone de 63 kilómetros de costa con acantilados y fondos marinos que quitan la respiración por su belleza.
- Una buena parte del parque natural es de origen volcánico.
- Su biodiversidad hace que Cabo de Gata tenga un valor ecológico incalculable.
- La UNESCO ha incluido a Cabo de Gata dentro de la Red Mundial de Reservas de la Biosfera.
- Cabo de Gata está catalogado como geoparque. ¿Qué quiere decir? Que es una zona con una red de lugares de gran importancia geológica y que, a su vez, tiene otros lugares de gran valor cultural, etnográfico y ecológico.
El parque natural de Cabo de Gata se gana tu admiración
a través de la vista, el olfato y el paladar.
Persiguiendo el indalo de Almería
Cabo de Gata está repleta de una imagen que se hace visible por toda la costa y por sus pueblos. Os hablamos del indalo, una figura rupestre cuya procedencia se le atribuye a la cueva de los Letreros, ubicada en el municipio de Vélez-Blanco. El indalo representa a una figura humana con los brazos extendidos con los que sujeta un arco. El significado del dibujo no se ha logrado descifrar, si bien muchas de las teorías apuntan a una divinidad. Sea como fuere, el indalo se ha convertido en el símbolo de Almería y es el guía que nos llevará de la mano a descubrir todos sus misterios.
Por qué elegir Cabo de Gata para tus vacaciones
Si no sabes a qué lugar ir para tus vacaciones, te vamos a contar los secretos de Cabo de Gata. Aquí te esperan paisajes exóticos, kilómetros de carretera que se funden con un horizonte sin edificar, playas y calas salvajes de arena fina y aguas cristalinas, ruinas construidas por los piratas, desierto y una gastronomía que nos hace la boca agua con sólo recordarlo. No te pierdas sus tapas… ¡o lo acabarás lamentando!
A quién recomendamos Cabo de Gata
La respuesta a esta pregunta debería ser a todo el mundo, pero sí que es cierto que si te gusta un tipo de turismo concreto vas a disfrutar de Cabo de Gata todavía más. El Parque Natural de Cabo de Gata es para las personas que gustan de la tranquilidad, de lugares remotos y escondidos, de playas y calas alejadas de la masificación turística, de personas que prefieren la naturaleza y quieren alejarse de las grandes ciudades. Podrás descubrir pueblos con un encanto mágico, paisajes naturales de película y, además de todo lo descrito, vas a saborear Cabo de Gata con el olfato y el paladar gracias a su comida para chuparse los dedos.
Nos ha llevado mucho tiempo elaborar este post, así que esperamos que lo disfrutéis leyéndolo tanto como lo hemos hecho nosotros escribiéndolo. Esta zona nos ha enamorado, y por eso te invitamos a que sigas leyendo para que descubras todo lo que hay que ver y hacer en Cabo de Gata.
La belleza no tiene nombre ni rostro, y no necesita
esconderse bajo una máscara para mirarnos a los ojos.
El arrecife de las sirenas
Las leyendas hacen que hechos verídicos se transformen en fantasías románticas, más fáciles de recordar y más atrayentes a la hora de contar. ¿Sabéis por qué este impresionante arrecife situado debajo del faro de Cabo de Gata se le puso el nombre de El arrecife de las sirenas?
Hubo una época, hasta mediados del siglo pasado, en el que este arrecife era el patio de recreo de focas monje. Los marineros, a los que siempre les ha rodeado el misterio y la poesía en alta mar, les ponían nombres más especiales y románticos a los animales. Y es, por este hecho, por el que el arrecife donde decían que vivían sirenas, en realidad habitaban focas monje.
Kayak y snorkel en Cabo de Gata
Cuando viajamos nos gusta hacerlo teniendo la oportunidad de tener otro punto de vista. Si hay algo que caracteriza Cabo de Gata es su faro, el guía que alumbra el camino de las embarcaciones y que salvaguarda el arrecife de las sirenas. Nosotros decidimos visitar este lugar en kayak, y fue una de las mejores decisiones que tomamos en todo el viaje.
Buscando diferentes opciones acabamos encontrando a Cabo de Gata Activo, una empresa con la máxima puntuación en TripAdvisor. La experiencia fue increíble, con unos guías encantadores y que te contaban las historias como si fueran propias, que estaban atentos y en todo momento te ayudaban a andar en kayak. La excursión, de unas 3 horas, incluía además paradas como la entrada a una gruta en kayak en el arrecife de las sirenas o algo más de media hora para hacer snorkel. Nos dieron todo el material y era increíble la cantidad de peces que había. Hubo gente que incluso vio pulpos, pero nosotros no tuvimos esa suerte.
Desde la distancia queremos mandar un fuerte abrazo a Juanma, quien casualidades de la vida usó este blog hace unos años para organizar su viaje a Nueva Zelanda y el destino quiso que nos conociéramos en su empresa de kayak en Cabo de Gata. Gracias a ti y a Paqui por descubrirnos esas estupendas tapas de Angelita en la Fabriquilla mientras charlábamos de viajes, recuerdos y de Cabo de Gata.
Recomendación Kayak
La playa de los Genoveses
Para acceder a la playa de los Genoveses primero hay que llegar al municipio de San José y de ahí, a unos 3 kilómetros y después de pagar un peaje de 5€ por pasar una barrera para circular con el coche (en la segunda quincena de septiembre no había nadie para cobrarnos), nos aguarda una playa para el recuerdo. Su nombre viene de la batalla que mantuvieron los seguidores de Alfonso VII, liderados por la República de Génova, contra los musulmanes que ocupaban las tierras.
La playa de los Genoveses está considerada como una de las más bellas playas de Almería y de España. Y lo es porque es salvaje, porque las dunas bañan la costa de arena fina y dorada, porque la vegetación se instala en su orilla y porque el viento te envuelve y te acurruca antes de zambullirte en sus aguas de azul turquesa. Es una playa a la que, sinceramente, no te puedes resistir.
Si tú también buscas el camino hacia rutas salvajes,
dirige tus pasos hacia la playa de Mónsul.
La playa de Mónsul
En nuestro viaje a Cabo de Gata, decidimos ir primero a la playa de Mónsul antes que a la playa de los Genoveses. Lo hicimos por estar más lejos de San José, para que a la vuelta nos fuéramos acercando en vez de alejando. Si has llegado hasta aquí preguntándote qué ver en Cabo de Gata, la playa de Mónsul es la respuesta que estás buscando.
Un océano de arena que se ondula y arremolina sobre la Peineta de Mónsul, unas vistas hacia los ojos azules de Almería, un viento salado que galopa por el aire… y un paseo hacia lo que debería ser el estado natural de nuestras playas y costas, libres de hormigón que tanto daño ha hecho en el pasado.
Esta playa es, junto a la de los Genoveses, una de las playas más bonitas del Parque Nacional de Cabo de Gata. Muchos cineastas la han elegido para rodar en ella, y en medio de la misma se puede contemplar una gigantesca roca que yace adormilada. Divide en dos la playa, como si la tierra volcánica hubiera perdido su lengua de lava por el camino. ¿Vas a perderte su arena fina y aguas cristalinas?
La cala escondida
La cala escondida la descubrimos gracias a los chicos de Naranjarte, a los que si todavía no conocéis lo podéis hacer leyendo la siguiente entrevista que les hicimos en el blog. Esta preciosa cala, al estar oculta de turistas, hace que tengas la suerte de tenerla entera para ti. No esperes de ella arena blanca ni piedras preciosas, pero sí tranquilidad, sombra y unas aguas perfectas para hacer snorkel.
Para encontrarla, tan sólo hay que ir hacia la Isleta del Moro y de ahí tomar un camino de tierra en el que dejas el Castillo de San Felipe a la izquierda. El camino sigue cabreteando por la costa, pero antes de eso tenemos que aparcar el coche, recorrer andando la Playa del Embarcadero y, justo al final de ella y detrás de un peñón afilado, tendremos nuestra recompensa.
La Isleta del Moro y la Playa de Peñón Blanco
Si lo que buscas es un pueblo para el recuerdo, uno de esos pueblos blancos de Cabo de Gata que contrasta con su árido paisaje, la Isleta del Moro es uno de los destinos que debes añadir en tu bitácora de viaje. Nos han hablado muy bien para comer paella en el restaurante de la Ola, pero nosotros no pudimos probarla porque el día que fuimos estaba cerrado.
Cuando divisas la playa de Peñón Blanco y la Isleta del Moro por primera vez, enseguida te das cuenta de que el paisaje que tienes ante tus ojos es diferente. Su belleza traspasa el objetivo de la cámara y el color del mar te invita a contemplar y a disfrutar de un horizonte que no puedes dejar de recordar a tu vuelta.
Las barcas de los pescadores se mecen en la alfombra azul que decora la costa, y ese olor a parrilla de pescado atrapa tus sentidos y dirige tus pasos hacia uno de los manjares de la zona y a un precio muy razonable.
Os invito a que veáis el videoclip de David Bisbal en el que nos cuenta diez mil maneras para enamorarnos de Almería. En el vídeo se puede distinguir muchos destinos turísticos de Cabo de Gata, y entre ellos no podía faltar la playa de Peñón Cortado.
El mirador de la Amatista
Ubicado en un promontorio con excepcionales vistas al mar y a la costa virgen de Cabo de Gata, El mirador de la Amatista te transporta a un paisaje de increíble atractivo. El sol acaricia las olas con dulzura como si estuviera derramando lágrimas a su paso, y viste el litoral con una luz que refleja como nadie tu estado de ánimo.
Agua Amarga, sus callejuelas, paella y helado de avellanas
Agua Amarga es un destino perfecto para evadirte del bullicio, para pasear por la playa y descubrir rincones escondidos como pueden ser las callejuelas con ornamentos florales. Nosotros estábamos de celebración, pues no todos los días te premian por ser el mejor blog de viajes, así que fuimos a comer una paella al restaurante de los Tarahis. Con vistas al mar y la tranquilidad que buscábamos, esa paella de marisco nos supo a mar, a productos de la tierra, a buena comida y a un precio asequible. Como secreto, te recomendamos después ir a la plaza que se llama La Plaza a comerte una tarrina de helado de avellanas. ¡No te podrás resistir!
La playa de los muertos
La playa de los muertos está situada a unos 5 kilómetros de Carboneras. Para llegar a ella se debe dejar el coche en un parking y andar durante cerca de 20 minutos a través de un camino de rocas, lo que hace indispensable bajar con buen calzado, agua en abundancia y únicamente con lo que creamos que vayamos a usar. Si vas con objetos voluminosos y pesados, llegará un momento que quizá quieras dejarlos por el camino, así que piensa bien qué llevar antes de ir.
No te queremos engañar, la playa de los muertos es terriblemente fea si miramos a su costado izquierdo. Al fondo se levantan unas chimeneas de hormigón humeantes que contrastan con lo hermoso y salvaje del costado derecho de la playa. El origen del nombre de la playa de los muertos se debe a los cadáveres que aparecían en la misma arrastrados por las corrientes marinas. Eran náufragos o navegantes, a los que ahora se le unen emigrantes que se juegan la vida en el Estrecho de Gibraltar en busca de un futuro mejor.
Y es que cuando viajas suceden cosas, cosas que tumbado en el sofá siguen sucediendo pero no las ves. Hasta la fecha no habíamos visto nunca una patera varada en la orilla, vacía como una cáscara y con olor a gasolina y a vidas que se aferran a un clavo ardiendo. Personas como tú y como yo cuya única salida es la huida hacia los peñascos, perdiendo a su paso su ropa, su felicidad y, en muchos casos, su niñez o su propia vida.
El atardecer en la playa de los muertos es maravilloso. Su color ocre se aviva con las últimas llamas del sol, que lo transforman y lo balancean dulcemente gracias al vaivén de las olas. Si algo cambió esa belleza en nuestro viaje fue la visión de otra patera, esta vez con personas indefensas a merced del oleaje y mar adentro, una imagen que se queda grabada en la retina y con la que no podemos mirar a otro lado.
Llaman a Cabo de Gata la ruta del silencio,
cuando en verdad debería llamarse la ruta del paisaje dorado.
La mesa de Roldán y su fiel faro
Lejos de las miradas de la playa de los Muertos, a apenas unos pocos kilómetros y previa subida de una empinada cuesta que es mejor realizarla en coche, nos tiende la mano la mesa de Roldán. Estamos sobre los restos de un cono volcánico extinto que, al igual que toda la sierra de Gata, estuvo bajo el mar en tiempos pasados.
Y, en la cima de este enclave con vistas privilegiadas, podemos observar los restos de una torre vigía y del faro de la mesa de Roldán.
Las minas de oro de Rodalquilar
Rodalquilar es un municipio situado entre El mirador de la Amatista y Las Negras, y es de obligada visita principalmente por sus minas de oro. Durante un siglo entero se vivió una fiebre de oro que duró hasta la década de 1990. Este preciado tesoro creó prosperidad y atrajo a empresas y particulares de España, de Europa e incluso América.
Las minas, a día de hoy y a pesar de continuar teniendo oro bajo sus entrañas, no están explotadas debido a que el precio a pagar por la extracción es más elevado que el beneficio obtenido. Esto ha hecho que las minas hayan envejecido mientras la población las abandonaba a su suerte, haciendo que sus arrugas y cicatrices fueran conquistando el terreno. Desde lo alto de las minas de Rodalquilar, si te lo propones, se puede escuchar la melodía del silencio, ese canto de sirena que, unido a los colores azafranados de la montaña, hace que el mar y el cielo se unan en el horizonte bajo el embrujo de dos enamorados.
Si fijas tu mirada, al fondo, se puede avistar a unos 3 kms la playa de Rodalquilar, un regalo natural que no puedes rechazar.
El playazo de Rodalquilar y el castillo de San Ramón
En nuestro camino de las minas de Rodalquilar hacia Las negras, debemos encontrar la llave que permita parar el tiempo en nuestro reloj de arena. Su nombre, playazo de Rodalquilar, suena a bravuconería, a bravata de barra de bar entre dos amigos de mejillas sonrojadas. Con esa idea nos acercamos hacia el playazo, un nombre que después de varias horas a merced de su hechizo, podemos afirmar que se queda corto.
El playazo de Rodalquilar no es una playa, ni un playazo ni una cala de proporciones bíblicas. Se trata, simplemente, de un lugar que saca sus brazos por debajo de la arena y no deja que muevas un solo palmo. Giras el cuello hacia el oeste y ves cómo un castillo del siglo XVIII, el Castillo de San Ramón, te observa y te invita a pagar por él la cantidad que sea necesaria, tu vida y tu alma si fuera necesario. Y más allá y rodeando este majestuoso castillo en venta, te esperan unas rocas depositadas como hamacas de un resort, como un lujo que sólo las cristalinas aguas del mar saben apreciar.
La arena y el mar invitan a tumbarte, pero nuestra recomendación es que muevas las piernas y te dejes llevar por los alrededores. Te esperan los acantilados de La Molata, dunas fosilizadas, calas escondidas y senderos por los que perderte como un explorador.
Las mejores playas de Cabo de Gata
Es imposible escribir en un listado las mejores playas de Cabo de Gata, porque ordenar estas maravillas es como tener que elegir entre dos helados con tus respectivos sabores favoritos. Lo que sí podemos hacer, al menos, es enumerar esas playas que visitamos en Cabo de Gata y que nos robaron el corazón.
- Playa de Mónsul
- Playa de los Genoveses
- La Cala Escondida
- Playa del Peñón Blanco
- Playa el Playazo de Rodalquilar
- Playa de las Negras
- La Playa de los Muertos
Sabemos que nos quedaron varias playas por visitar, pero somos de la creencia de que siempre tienes que dejar de ver algo en un lugar para tener la excusa de poder volver en el futuro. Por eso sabemos que tenemos que volver a Cabo de Gata para ver la playa de San Pedro, la cala del Plomo, la cala Rajá y otras playas de ensueño.
Qué ver en los alrededores de Cabo de Gata
Visitar Cabo de Gata es perderte en carreteras cuyo silencio sólo lo rompe el canto de las cigarras. Es una mirada a tu pasado, a tu niñez, a cuando esos ojos inocentes veían el mundo distante y alejado de cualquier tipo de preocupación. Como has visto Cabo de Gata ofrece muchos destinos increíbles, y a su alrededor tenemos la suerte de encontrar otros lugares que harán posponer tu vuelta a casa.
Mojácar
A 20 kilómetros al norte de Carboneras nos aguarda el pueblo de Mojácar. Es una escultura hecha en piedra, una obra de arte adornada por casas blancas con encanto que suben en espiral hasta lo alto de un cerro. Es un mirador natural con espectaculares vistas y es, también, un laberinto de callejuelas con nombres que te harán esbozar una sonrisa.
Si queréis sentir el mar, disfrutar de una bella estampa de Mojácar y comer en un lugar agradable y a buen precio, os recomendamos la pizzería Pulcinella situada en la Plaza Nueva. Pescados a la brasa, música en directo y una carta para celíacos con la que poder elegir un buen plato o pizza sin gluten.
Almería
Describir la ciudad de Almería con una sola palabra es muy fácil: tapas. Antes de ir a Cabo de Gata hicimos una parada de un día por Almería. La noche había caído sobre los hombros de su capital y nada más salir del hotel la calle Jovellanos conquistó nuestro paladar. En el norte no estamos acostumbrados a recibir pintxos a cambio de la consumición, y esas tapas de pescadito frito, paella, mejillones, albóndigas o sepia a la plancha era mucho más de lo que nuestra imaginación podía comprender. Nuestra recomendación, el Jurelico, un lugar para comer muy bien y con todo tipo de opciones para comer sin gluten.
De Almería nos gustaría destacar otra visita imprescindible: el conjunto Monumental de la Alcazaba de Almería. La visita es gratuita, y te acerca a un pasado cuya Historia debemos conocer. Se trata de uno de los conjuntos monumentales y arqueológicos árabes más importantes de España. Obligada visita y totalmente recomendable.
El desierto de Tabernas
Este desierto lo encontramos a escasos 30 kilómetros al norte de la capital de Almería. Nos faltó tiempo para perdernos, para saborear la tierra árida y polvorienta del desierto de Tabernas que hace que sea una de las extensiones secas más grandes de Europa. Hubo una época en la que Hollywood vino a Almería a grabar sus películas del oeste y a filmar el spaghetti western. Por eso aún hoy se puede seguir visitando algunos de sus decorados, como por ejemplo Oasys MiniHollywood y Fort Bravo.
Cómo llegar a Cabo de Gata
Valencia y Almería están unidas gracias a la autovía del Mediterráneo, la autovía A7. Por eso es tan cómodo acceder a Cabo de Gata si nos acercamos desde el este.
Si bajamos a Cabo de Gata desde Madrid, lo que tenemos que hacer es tomar la autovía del Sur, la A4. Esto nos va acercando hasta Jaén, desde donde en vez de bajar hacia Granada, lo que haremos es ir bajando en dirección suroeste hacia Guadix. Ya por esa zona, Almería estará señalizada y nos llevará hasta Cabo de Gata.
Para saber cómo ir de Sevilla a Cabo de Gata, debemos tomar la autovía en dirección Granada a través de la A-92 y no dejarla hasta encontrar la A7 e ir hacia Almería y de ahí a nuestro destino.
Gracias por compartir el artículo. Me sirvió de mucha ayuda para saber qué ver en Cabo de Gata. Gracias, lo recomiendo por su buen contenido.
Gracias por tu comentario. Nos alegramos que te haya servido este artículo para saber qué ver en Cabo de Gata.
Un saludo.