El derecho a soñar mirando las estrellas

Hola, lector. ¿Cómo ha comenzado tu semana? Hoy te voy a hablar del cielo, de las estrellas… de los sueños.

Al final de su jornada laboral, el sol cierra las cortinas de su habitación antes de ponerse el pijama y lavarse los dientes. Acostado sobre la almohada, se acomoda encima de su cama y mira a través de ese opaco proyector que, en la oscuridad, brilla en todo su esplendor. Así es como comienza a soñar en todas las cosas que podrá hacer el día de mañana.

¿Sabías que yo también sueño con las estrellas y que ahora mismo somos el 2º mejor blog de viajes en habla hispana y el 1º con más de 5 años de antigüedad? Hasta el día 13 hay tiempo para que votes a Cómo ser un kiwi como el mejor blog, y yo te estaría eternamente agradecido si votas o si compartes esta carta por la inmensidad de la Vía Láctea.

Un empujón de este calibre para el proyecto sería como la fuerza que ejercen los propulsores en los cohetes espaciales. Y esto haría que te compensara con más y mejores artículos, más libros y, sobre todo, con más pasión. Por eso, como anticipo, no quería terminar sin ofrecerte un contenido que te va a encantar:

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