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Arthur´s Pass National Park y sus tracks

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Podía tranquilamente dejar el post en blanco para no ensuciar el paisaje con una sucesión de palabras desconocidas para la naturaleza. Sin embargo, este comensal debe proseguir su aprendizaje a base de prosa que intentará estar a la altura de las circunstancias, pese a que en boca de algunas personas sea difícil de leer (les gusta llamarlo pereza cuando traduciéndolo al castellano significa desinterés).

Pasada la primera criba os doy la bienvenida a Arthur´s Pass National Park. La carretera, de una longitud aproximada de 140 km, recorre su primera parte entre montañas cubiertas por hayedos si entramos desde el oriente. Desde allí sube hasta la cumbre de Arthur´s pass con una altura de unos 1.000 metros para después descender por el flanco occidental de los Alpes meridionales de la isla sur de Nueva Zelanda. Pasen y vean. No os preocupéis que esperamos un día soleado para todo el día.

Mi entrada al parque nacional fue a través de Springfield por la zona sur y para las 8 de la mañana estaba en mi primera parada, Castle Hill, quien ostenta el privilegio de ser el protagonista de las dos imágenes anteriores.

No se trata de ninguna ciudad de la antigüedad, las rocas de Castle Hill son de piedra caliza y han adquirido esta forma atrayendo a las personas, en el pasado y presente, por la sedimentación, presión y erosión del entorno. A más de un escalador se le hará la boca agua cuando sepa que está permitido trepar por sus inmediaciones.

Eso sí, tened muy presente las sabias palabras de la montaña: la escalada es un privilegio, en ningún caso un derecho.

Puedo sincerarme abiertamente y dar mi gratitud a la cámara de fotos que tan buena labor está haciendo, sea en días soleados, bajo una incesante lluvia o haciendo equilibrio en el exterior de la furgoneta con el fuerte viento de cara. Llegará el día en que tenga que dejarte por otra. Nos gustan las jóvenes y es algo que no podemos remediar pero ten muy presente una cosa: tú has sido la primera y el recuerdo que habrás dejado en mí será imborrable.

Es imposible describir la sensación de un día soleado y acercarse poco a poco a un manto blanco para repentinamente hacer desaparecer todo llevándote a una infinita sala de un sólo color.

El pueblo de Arthur´s Pass es el único que existe en esta carretera entre Springfield y Kumara Junction. A pocos kilómetros de allí podemos divisar un impresionante viaducto desde lo alto de un mirador al cual accederemos a través de un desvío a la derecha.

Los recorridos de monte que la gente normalmente realiza están en los alrededores del pueblo y la parte restante no suelen aconsejarse tanto en los I-sites. Mi deber, como explorador  y corresponsal, es hablaros de ellos. Para que no os llevéis sorpresas, deciros que este artículo no es más que la antesala de la mejor travesía de un día (compartiendo el honor con Mount Roy) que he hecho en la isla sur de Nueva Zelanda.

Os narraré primero sobre Bealey Valley track por encontrarse a 1 km de distancia del viaducto. Enfrente del comienzo veréis un pequeño refugio. Avisaros que seguramente os paséis de largo porque está mal señalizado y su parking tiene cabida para 4-5 coches a lo sumo. El camino de ida vuelta son 2-3 horas aunque todo dependerá de lo lejos que queramos ir.

Nuestros pasos primero recorrerán un sendero por el interior de los hayedos cruzando el río a través de un puente y saliendo al exterior en alguna ocasión. Más adelante cambiaremos la tierra por las rocas siguiendo el camino ascendente del río a través del valle. Llega un punto que no está marcado y existen señalizaciones que nos advierten del peligro por avalanchas. El sitio es muy bonito y cada uno podrá decidir hasta dónde llegar. Eso sí, las piedras están todas húmedas y son muy resbaladizas por lo que debería usarse un buen calzado.

Las siguientes dos posibilidades, más paseo que el anterior, son por un lado el Bridal Veil track y Punchbowl Falls track. El primero no os lo recomiendo al ser hora y media de caminata por el interior del bosque sin vistas al exterior y debido a que la vuelta la tendremos que hacer por el mismo sitio o bien por la carretera. Aún así, las dos opciones parten del mismo punto a escasos 300 metros de la única tienda del pueblo de Arthur´s Pass por lo que se podrá decidir sobre la marcha.

Acercarnos a la catarata merece más la pena. En una hora estamos de vuelta y aunque para algunas personas subir tantas escaleras les resultará algo fatigoso si se hace despacio no deberían cansarse tanto. Iremos la mayor parte del tiempo en el interior (bueno para resguardarnos de la lluvia en caso de).

¿La recompensa? Una caída libre de agua desde una altura de 131 metros.

No podía pasar por alto el hecho de que por fin pude ver ante mis ojos unos de los pocos animales que me quedaban por encontrar en líneas generales, el Kea. Os hablo de un papagayo que únicamente vive en algunas montañas de la isla sur de Nueva Zelanda. Juguetón y revoltoso, suele acercarse a los humanos a indagar entre sus enseres y precisamente ese es uno de sus mayores peligros. Habéis de saber (aunque hay carteles que nos informarán de ello a lo largo y ancho de toda la isla) que alimentar a un Kea es sentenciarlo a muerte. La mayoría de nuestra comida resulta ser veneno para su organismo y acaban muriendo intoxicados.

Cuidemos lo que nos rodea y así no tener que dar rodeos para cuidar lo que a punto estamos de perder.

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2 Comentarios

  1. ¿Has tratado de sacar una foto a ojos cerrados?
    Visto lo visto, como mínimo sacarás una maravilla de paisaje. Y como mucho, 3. O más.

    Por un momento he pensado que habías encontrado un kiwi. Veo que no. Me defraudas.

  2. No se ha dado el caso todavía de sacar una foto sin mirar a lo que disparaba (aunque ha habido muchas fotografías de carretera sin mirar la pantalla).

    Los Kiwis son como el amor, cuanto más se hacen de rogar mejor. Lo malo es que pase como allá en el norte, que para cuando llega la ocasión vamos por nuestra segunda dentadura postiza!

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