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Cooks Cove walkway en Tolaga Bay – East Cape parte 4

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Dejamos el faro atrás, a él y la libertad que únicamente la solitaria estampa de esa zona escondida de la East Cape es capaz de otorgar. La siguiente parada no se encuentra muy lejos pero dadas las precauciones a tomar en la carretera, es fácil que la noche se eche encima. Las aguas se tornan bravas, un largo manto blanco es escupido a la lejanía con la inestimable ayuda del fiero viento. Hace frío en Tolaga Bay, no así dentro de nuestro inquebrantable espíritu viajero, ávido de nuevos lugares por conocer.

En esta ocasión estábamos preparados. Kiwi Raider tenía todo su arsenal a punto, en perfectas condiciones para encarar la cima o domar a las infiltradas vacas que había pastando de incógnito para despistar. Así que no queda otra sino agachar la cabeza y hacer caso a la experta: si hay reses en el camino será que corremos un serio peligro…

Acantilado Tolaga Bay

La mañana siguiente despierta amigable, con el sol en el horizonte para alumbrar el recorrido y mostrarnos así los escarpados acantilados por los que tendremos que desfilar posteriormente. No os asustéis, en el recorrido que os propongo, el Cooks Cove walkway, no tendremos tramos en los que vencer nuestra fobia a las alturas. Únicamente si nos asomamos saliéndonos del camino es cuando aprenderemos el significado de dar un salto al vacío.

Este track tiene una longitud de 5,8 kilómetros con una duración estimada de 2 horas y media. A diferencia de otros senderos, el Cooks Cove walkway no está muy bien señalizado; dato poco relevante dado que se ve claramente el lugar por donde ir, siempre en una continua subida aunque no excesivamente empinada. La primera parte es de interior, en el que andaremos a través de una arboleda. Recomendación: andar con cuidado en esta zona por lo resbaladizo del terreno.

Paisaje Cooks Cove Walkway, Tolaga Bay

Cuando salimos al exterior lo que más llama la atención es el color de los prados. El verde tiene una gran variedad de tonalidades (aunque nosotros, los hombres, sólo veamos una en cada color) y difícilmente podremos ver un verde tan vivo como allí.

Si optamos por movernos hacia la izquierda, a las puertas del acantilado, tendremos la oportunidad de ver desde las alturas la pasarela más fotografiada de la isla norte de Nueva Zelanda. Con ella, veremos la inmensa bahía a la que el mar ataca una y otra vez sin descanso y sin aparente fecha de caducidad.

Pasarela Tolaga Bay, Nueva Zelanda

A partir de la mitad del recorrido, el terreno se suaviza sin que nuestras rodillas sufran mucho, tanto a la subida como a la bajada. El camino se hace placentero al estar respirando aire limpio, mezclando la mejor de las esencias del prado junto con el frescor aroma que las aguas proporcionan. Un lujo para nuestros contaminados pulmones de alquitrán que sin duda agradecerán el gesto.

Al ser una zona en donde la lluvia hace acto de presencia durante casi todo el año, será fácil encontrar embarrado el trayecto. Resultaría únicamente un problema estético al mancharnos los bajos de los pantalones pero lamentablemente hará que las caídas también puedan ser el pan de cada día.

Preparada para ir a la fiesta de fin de curso

El final del track viene representado por un mirador con unas vistas dignas de una reina. Veremos dos salientes, peñones que escapan del dominio de sus aguas con imponente osadía, salvaguardando un prado verde fuego, paraíso de los herbívoros huéspedes.

La conjunción entre belleza y tranquilidad proporcionará la llave para escuchar la naturaleza. Es triste comprobar de primera mano cómo hemos olvidado cómo suena el mar, cómo pían los pájaros o cómo el viento sacude suavemente nuestro cabello. Nos hemos acostumbrado tanto a los ruidos externos que cuando acabamos en un lugar como éste, volvemos a experimentar como un bebé. Volvemos a percibir lo que nos rodea con total asombro y goce.

Vistas desde el mirador de Cooks Cove Walkway

Cómo llegar a Cooks Cove Walkway

Cooks Cove walkway está situado en el extremo sur de la Bahía de Tolaga, a 52 kilómetros al norte de Gisborne. En la carretera estatal 35 tomar el desvío hacia Wharf Road, a 2 km al sur del municipio de Tolaga Bay.

En Cómo ser un kiwi | Three sister´s beach

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4 Comentarios

  1. ¿Quién iba a pensar que el agua con la tierra se convertía en barro? Si lo hubiesen puesto en el cartel informativo de la entrada nos hubiésemos calzado para la ocasión, y no hubiéramos frotado las zapatillas con toneladas de barro en el río.
    Ya que estamos te doy las gracias, Kiwi Jones, por tus consejos a cerca de cómo bajar pendientes cuando está el suelo mojado y muy resbaladizo aunque no olvidemos el dicho aquel “consejos vendo y para mí no tengo”, y lo digo porque recuerdo tu caída y cómo me mordía la lengua para no reirme.

    Pero lo importante es que llegamos a ese mirador y disfrutamos de aquellas vistas, aun con dolor intenso en la rodilla (y ayudada por un palo como bastón. Si lo llego a saber antes visitamos el ACC) y franqueando a las vacas de la zona (que otra cosa no, pero los cuernos puntiagudos se veían a distancia).

    En fín, una experiencia más que quedará en el recuerdo y en este baúl de los recuerdos.

  2. Quería comprobar si amortiguaba el golpe, más que nada para saber si tenía que preocuparme de tus tropiezos o no…

    Oye, no estaría nada mal eso de que avisaran lo del barro antes. ¡Si estuviéramos en Estados Unidos les podríamos haber puesto una demanda por publicidad engañosa!

  3. Me ha parecido muy interesante el artículo, y viendo las fotos y las vistas parece que merece la pena calzarse las botas, botas de monte a poder ser, no me gustaría acabar como el rosario de la aurora aunque hay que estar preparado para todo.

    Belleza y tranquilidad, no creo que se pueda definir mejor.

    Gracias Xabier.

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